Star Wars Squadrons

Los que jugamos durante muchas horas en nuestra infancia a la saga Rogue Squadron, vimos con mucho interés cómo un juego de corte similar salía al mercado. En Star Wars Squadrons tomamos parte tanto de la Rebelión con el escuadrón Vanguardia como del Imperio con el Titán, en una historia en la que se entrelazan los caminos de ambos grupos.

 

Progresaremos en la contienda militar en una sucesión de misiones que carecen de mucha chicha. Se dividen generalmente en 3 partes y consisten en matar y destruir objetivos desde dentro de nuestra cabina. Tendremos bastante trabajo, dado que el piloto puede modificar hacia dónde dirige la energía: escudos, motores o armas. En las naves más avanzadas, podremos incluso mover los escudos hacia delante o atrás de la nave para así hacer frente a las situaciones de combate que se nos proponen. Sin VR ya es bastante inmersivo, pero el vuelo con la nave no termina de ser satisfactorio (derrapar en el espacio, ¿en serio?). 

 

Entre misión y misión visitaremos el hangar en donde escucharemos insulsos monólogos de nuestros compañeros de escuadrón, mientras nos "movemos" de una a otra cámara fija. A la hora del combate, sinceramente dan del todo igual al no poder casi interactuar con ellos. Y el multi termina de ser sosísimo.

Nota: 4. Sinceramente, quien quiera jugar con naves de Star Wars que vaya al Battlefront 2 y seleccione el modo Asalto de Naves. La historia de Squadrons no va a ninguna parte. Juego olvidable.